El Ministerio de Salud nacional reiteró recomendaciones dirigidas a toda la población y, en especial, a los grupos de riesgo, como mantener una buena hidratación, consumir frutas y verduras, usar ropa liviana y evitar actividad física intensa, ante el alerta roja por temperaturas extremas emitido por el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) para la Ciudad de Buenos Aires y el Conurbano.

Así, la cartera sanitaria aconsejó especial cuidado con personas mayores, bebés, niños y niñas, personas embarazadas y en lactancia, personas con alguna enfermedad crónica o con sobrepeso, personas expuestas al calor en su ambiente laboral, quienes viven en situación de calle, y aquellas personas que consideren que pueden estar más expuestas por el impacto de la ola de calor.

Las recomendaciones en lugares cerrados (casa, trabajo, otros) para evitar golpes de calor son: hidratarse, tomar agua con una mayor frecuencia (aun cuando no se sienta sed), consumir agua segura, evitar bebidas con cafeína o con azúcar en exceso, muy frías o muy calientes. También incorporar frutas y verduras en la alimentación y evitar las comidas abundantes, así como la realización de actividad física intensa.

Para el cuidado de la salud en la vía pública se sugiere evitar la exposición directa al sol en horarios de mayor temperatura (10 a 16 horas), en especial bebés, niñas y niños pequeños. Además, es importante utilizar protección solar, mantenerse hidratado y consumir agua segura aun cuando no se sienta sed.

Con respecto a las niñas y los niños es conveniente ofrecerles continuamente líquidos, preferentemente agua o jugos naturales, sin esperar a que los pidan. En el caso de lactantes es recomendable darles el pecho de manera más frecuente.

Respecto a la vestimenta, procurar vestirse con ropa holgada, liviana, de algodón y de colores claros, bañarlos y mojarles el cuerpo con frecuencia, evitar que se expongan al sol, especialmente de 10 a 16 horas. En todo momento es recomendable colocarles gorro, un protector solar y mantener el lugar ventilado o con aire acondicionado (ya sea en una casa o en lugares públicos).

Asimismo, en bebés, es importante asegurar que la piel no se encuentre irritada por el sudor en el cuello, pecho, axilas, pliegues del codo y la zona del pañal.

En relación a las personas adultas mayores, mientras dure la ola de calor se sugiere no salir a la calle sin compañía y en caso de sentirse mareado o muy afectado por las altas temperaturas se debe prescindir de salir al exterior para que el calor no refuerce negativamente esta sintomatología.

Los efectos de la ola de calor

Una ola de calor es un período excesivamente cálido, que puede tener un impacto en la salud de leve a muy alto, sobre todo para grupos de riesgo (niños y niñas, mayores de 65 con enfermedades crónicas como cardiovasculares, respiratorias, diabetes y obesidad).

Los efectos van desde una deshidratación, golpes de calor o complicaciones, hasta un aumento de la mortalidad. Asimismo, se sugiere prestar atención a signos como sed intensa y sequedad en la boca, temperatura corporal mayor a 39 grados, sudoración excesiva, sensación de sofocación, piel seca, agotamiento, mareos o desmayo, dolores de estómago, falta de apetito, náuseas o vómitos, y dolores de cabeza, entre otros.

Para una mayor información ingresar a: http://www.argentina.gob.ar/salud/verano/olas-de-calor