El programa, impulsado por la Federación Internacional de Deportes Universitarios (FISU), se constituye como un proceso de certificación para universidades en el campo de la salud y el bienestar en todas sus vertientes.
En este sentido, resulta importante destacar que la iniciativa, que nació en mayo de 2020, consiste en un proceso de validación en el campo de la salud y el bienestar en todas sus vertientes, por lo cual FISU determinó cien criterios, en conjunto con un grupo de expertos internacionales, para contribuir a los objetivos de desarrollo sostenible definidos por las Naciones Unidas.
Por otra parte, el Programa también se centra en cuestiones específicas como la igualdad de género, la reducción de las desigualdades, la inclusión, la energía limpia y asequible, el desarrollo comunitario sostenible, el consumo y la producción responsables, la acción climática, las alianzas y sinergias entre socios internos y externos en el campus, entre otras.
Al respecto, el presidente interino de FISU, Leonz Eder, explicó que “Campus Saludable contribuye a un entorno integralmente sano, diverso y atractivo para los estudiantes”. Asimismo, apuntó: “La entrega formal de las primeras etiquetas nos llena de gratitud y orgullo”.
