Así lo afirmó el empresario matancero del sector cárnico y, además, aseguró: “Nosotros tenemos que consumir lo que queremos y, con lo que sobra, darle un cupo a la exportación”. Por otro lado, sobre el cierre de exportación de carne por un mes, afirmó: “No sé si con esta medida los precios van a bajar, pero que no van a aumentar más, seguro”.
Esta semana, el Gobierno nacional decidió cerrar la exportación de carne por un mes, debido al incremento desmesurado en el precio de la misma, que fue de más de 60 por ciento, en el último año, según datos del Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (IPCVA). La medida, no obstante, podría ser por un período menor de acuerdo al impacto que presente.
Sobre el tema, Radio Universidad dialogó con el empresario matancero del sector cárnico, Alberto Samid, que cuestionó la actitud de algunos frigoríficos exportadores ante la situación: “Hay un sector que quiere vender la carne a cualquier precio afuera y no le importa la mesa de los argentinos”.
“Estamos los que defendemos la mesa de los argentinos y decimos que la carne tiene que tener un valor de acuerdo a lo que gana la gente y, lo que sobra, exportarlo”, sostuvo, y aseveró: “Los exportadores dicen que deben exportar todo lo que puedan y, lo que sobra, vender a los argentinos. A eso le llaman “cortes populares”, a lo que rechazan los de afuera”.
“Nosotros tenemos que consumir lo que queremos y, de lo que sobra, darle un cupo a la exportación”, aseguró, y advirtió: “Estamos vendiendo un millón de toneladas de carne cuando solo se puede vender la mitad, no se puede vender lo que no tenemos”. “En un momento tan difícil como el que estamos pasando, sacar la carne a los argentinos es terrorífico”, criticó.
Puntualmente, sobre la decisión de cerrar las exportaciones por un mes, indicó que “si el Gobierno no hubiera tomado la medida, a fin de año, la mayoría de los argentinos hubiera tenido que pedir cien gramos de milanesa o de bola de lomo, como si fuera jamón cocido”. “No sé si con esta medida los precios van a bajar, pero que no van a aumentar más, seguro”, afirmó.
Además, sobre los posibles resultados de la política, indicó: “Si suspendemos las exportaciones por un mes, hacemos cupo de exportación para los frigoríficos que hicieron las cosas bien y vendemos la mitad de lo que se llevaba, esto termina bien. Pero, si después del mes, volvemos a vender todo lo que tenemos de nuevo, no habrá servido”.
Por último, se refirió a los incrementos en los precios de los alimentos, más allá de la carne: “Estos valores no se pueden pagar porque no están de acuerdo con lo que gana la gente”. “Nunca hubo tanta diferencia entre el precio de la comida y lo que gana la gente, y eso no se puede permitir”, concluyó.
