“Los chicos de entre 20 y 28 años no compran nada en los negocios, sino que compran por plataformas”, señaló el vicepresidente de la CAME, Alberto Kahale.

La semana pasada, el presidente del bloque Encuentro Federal, Miguel Ángel Piccheto, anunció que presentará un proyecto de ley para fijar un arancel del 30 por ciento a los productos que ingresen al país a través de plataformas extranjeras como Shein y Temu. El objetivo es proteger la industria nacional, ante la competencia desleal que representan los sitios.
Esto se debe a que las plataformas extranjeras se impusieron como una de las principales alternativas al momento de adquirir artículos a precios mucho más bajos que los del mercado local. Como si esto fuera poco, los lugares ofrecen la facilidad de que los bienes comprados llegan hasta el domicilio del consumidor.
Ante este escenario, el comercio local está en alerta, ya que los sitios representan un golpe más ante el derrumbe del consumo. En diálogo con El1, el vicepresidente de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), Alberto Kahale, aseguró: “Las plataformas como Shein o Temu son una competencia terrible para el comerciante de calles y avenidas”.
“Los chicos de entre 20 y 28 años no compran nada en los negocios, sino que compran por plataformas”, lamentó, al tiempo que remarcó que “estos lugares no pagan impuestos o alquileres como le pasa a los comerciantes”. “Terminan compitiendo entre estas mismas plataformas”, cuestionó.
La crisis de los textiles
Días atrás, el titular de la Confederación General Empresaria de la República Argentina (CGERA), Marcelo Fernández, instó a los consumidores a “no tentarse a comprar” algo extranjero, a pesar de la accesibilidad de los precios. Además, indicó que “hay casos como la producción de indumentaria, calzado, marroquinería y anteojos que están muy complicados”.
En ese sentido, Kahale también criticó que la competencia desleal que generan las plataformas extranjeras perjudica todavía más a los sectores con menor uso de capacidad instalada industrial: “Hay rubros como juguetes e indumentaria que tienen todo productos chinos”. “Así está quedando la producción nacional”, concluyó.
